Cuando un ser querido fallece, puede ser una experiencia emotiva. Lamentablemente, el manejo de las finanzas del fallecido puede aumentar el estrés. Aunque la mayoría de la gente sabe que hay que presentar una declaración de la renta final del fallecido, la mayoría de la gente no sabe cómo gestionar los ingresos recibidos después de que la persona haya fallecido. Estas rentas se denominan «rentas por causa de muerte» (IRD) y tienen sus propias normas especiales. Considere la posibilidad de trabajar con un asesor financiero mientras prepara un plan de sucesión o implementa el plan de sucesión de un ser querido.
Qué es la renta respecto a un difunto?
Los ingresos por fallecimiento (IRD) son los que se perciben después de la muerte de una persona pero que no se incluyen en su declaración de la renta. Cuando los beneficiarios se hacen cargo de las finanzas de una persona fallecida, la situación puede ser complicada. Esto es especialmente cierto si eran dueños de un negocio, tenían muchos tipos de cuentas bancarias y de inversión, o no estaban organizados.
Ejemplos de IRD incluyen:
- Sueldos, salarios, pluses, comisiones y pagas de vacaciones o enfermedad no cobrados
- Distribuciones de indemnizaciones diferidas
- Opciones de compra de acciones ejercidas
- Distribuciones imponibles de cuentas de jubilación
- Los intereses de las cuentas bancarias
- Dividendos y ganancias de capital de las inversiones
- Cuentas por cobrar pagadas a una pequeña empresa propiedad del difunto (sólo a base de efectivo)
Esto es un buen recordatorio de que la gente debe tener una lista detallada de cuentas financieras e inversiones para que los beneficiarios puedan consultarlas. Esto les dará una lista de tareas para notificarles su muerte y evitar que se pierdan cuentas en la confusión.
Cómo tributa el IRD?
El IRD es la renta que se habría incluido en la declaración de la renta del fallecido si éste no hubiera fallecido. Si estos ingresos no se incluyeron en la declaración final de la renta, se consideran IRD. El lugar donde se declara el IRD depende de quién haya recibido los ingresos. Si se paga al patrimonio, debe incluirse en la declaración fiduciaria. Cuando el IRD se paga directamente a un beneficiario, éste debe incluirlo en su declaración de la renta.
Si se pagan impuestos sobre el patrimonio por el IRD recibido, la legislación fiscal permite una deducción del impuesto sobre la renta por los impuestos sobre el patrimonio pagados por esos ingresos. En el caso de los beneficiarios que no hayan podido acogerse a la deducción del IRD en el impuesto sobre el patrimonio, es posible que puedan modificar la declaración de la renta para reclamarla.
Impacto del IRD en las cuentas de jubilación
Las cuentas de jubilación también pueden verse afectadas por el IRD. A medida que los inversores envejecen, tienen que empezar a tomar las distribuciones mínimas requeridas (RMD) de las IRA tradicionales, 401(k)s y otras cuentas de jubilación sujetas a impuestos. Los beneficiarios de estas cuentas tienen que seguir las normas de distribución y hacer las distribuciones obligatorias también.
Los RMD del año en que el fallecido fallece se consideran parte de su patrimonio. Cuando el valor del patrimonio de un difunto supera los 11 dólares.Si el patrimonio no alcanza los 7 millones de euros (límites de 2021), los posibles impuestos sobre el patrimonio pueden ser importantes.
La combinación de los impuestos sobre el patrimonio y los impuestos sobre la renta de las cuentas de jubilación sujetas a impuestos puede reducir en gran medida el valor de una herencia. La legislación fiscal permite la deducción de los impuestos sobre el patrimonio relacionados con las cantidades declaradas como IRD para reducir el impacto de esta doble imposición.
El resultado final
El IRD puede complicar rápidamente las finanzas de la herencia y los beneficiarios del fallecido. Existen oportunidades potenciales de ahorro fiscal, pero las normas pueden ser difíciles de entender incluso para las personas más expertas en finanzas. Por este motivo, resulta útil contar con la participación de un asesor financiero y un profesional de la fiscalidad para asegurarse de que no faltan ingresos o activos y de que la factura fiscal no es más elevada de lo que debería.
Consejos sobre la planificación del patrimonio
- Saber cómo aplicar el IRD a la herencia de un fallecido puede ser un reto. Es difícil concentrarse en normas y situaciones poco comunes cuando ya se está distraído por el impacto emocional de la pérdida de un ser querido. Contar con un asesor financiero de confianza que le guíe en este difícil momento puede ayudar a localizar las cuentas y evitar que se pierdan oportunidades de ahorro fiscal. Encontrar un asesor financiero no tiene por qué ser difícil. La herramienta de búsqueda de asesores financieros de nuestro equipo puede ponerle rápidamente en contacto con varios asesores de su zona. Si está preparado, empiece ya.
- Nuestra calculadora de declaración de impuestos tiene en cuenta su ubicación, estado civil, ingresos y personas a su cargo. Le permite estimar el efecto sobre sus impuestos adeudados en función de los cambios en sus ingresos, dependientes y retenciones federales.